martes, 31 de agosto de 2010

VESTUARIO DE LOS DANSAQ, EN LOS OJOS DEL MUNDO


El mes de agosto está dedicado al agua en Andamarca y, en su homenaje se cumple una serie de ritualidades ancestrales desde el primer día. El período que va del 20 al 27, es la semana central en la que el pueblo vive su inolvidable Fiesta del Agua, declarada Patrimonio Cultural. Numerosos eventos se van sucediendo sin descanso y alcanzan su climax los días 24 y 25. En otra oportunidad nos explayaremos y contaremos cómo es la “Fiesta de la Sequia” en nuestro pueblo.

Como quiera que los Apus y Wamanis indicaron otros rumbos a mi peregrinaje, no pude participar de manera presencial en esta celebración, que acaba de culminar. REcordaba, sin embargo, que el personaje central, el que acapara la atención de propios y extraños es el Dansaq, sacerdote intermediario entre el pueblo y las divinidades. El agua nueva llega precedida por el baile espectacular y desafiante de los Dansaq. Es indiscutible que su arte ha llegado a difundirse hasta a niveles internacionales y que, por desgracia, también ha llegado a extremos intolerables de distorsión y mercadeo en algunas ocasiones.

Muy a cuento la noticia difundida con gran aparato hace algunas semanas: los patrocinadores peruanos del evento Miss Mundo (creo que así se llama), presentaron la iluminada idea de llevar la vestimenta del dansaq a este certamen, como una gran realización nacionalista y de recuperación de nuestra identidad. Es el caso que, en el curso del evento, las candidatas deben lucir un vestuario típico de su país, en uno de los desfiles de calificación. Nuestra Miss Perú luciría la vestimenta de dansaq de tijeras, estilizado por supuesto, para que no quedaran ocultos sus encantos naturales. El argumento que decidió su elección entre tantos miles de trajes típicos existentes a lo largo y ancho de nuestra patria, fue uno muy simple: Como quiera que la Danza de las Tijeras es conocida en el mundo entero desde hace muchos años e identifica al arte de nuestro Perú, pues la ocasión se presentaba pintada e inmejorable. Es bueno recordar que en la versión del año pasado, nuestra Miss Perú lució una vestimenta del altiplano, provocando las iras del gobernante boliviano.

El razonamiento de los patrocinadores peruanos no carece de justeza, pero olvida un detalle crucial: el vestuario de dansaq de tijeras lo lucen solamente los dansaq QUE SON VARONES. Por eso, cuando conocí la información, me jalé los pocos pelos que me van quedando y pensé ¡qué extremos todavía nos tocará ver, Dios Santo!... Algunos organizadores de parrilladas en la gran Lima ya habían puesto a prueba nuestra capacidad de contemporización cuando, hasta hace poco, pretendieron imponer a danzantes de tijeras ¡MUJERES!... Algo contra toda racionalidad, y no porque la mujer carezca de capacidad, sino porque esta traslación de roles significa absoluto irrespeto a la esencia y fundamentos de la Danza de las Tijeras. Es bueno recordar que este baile ancestral, antes que ser un espectáculo barato de plateas,- como alguna vez nos dijo el viejo maestro Cirilo Inca -, es una función sacerdotal cumplida por varones que emulan la tarea de Juan Choqne desde que iniciara el Taki Onqoy en nuestras tierras. Los dansaq cumplen un ministerio y desde sus inicios, siempre fueron varones.

No somos dogmáticos ni machistas. Simplemente pensamos que con estas distorsiones, nos estamos saltando alegremente a la garrocha todo el fundamento ideológico y religioso si se quiere de nuestro pueblo a través de su historia. Las ideas mágico religiosas de las colectividades se han forjado desde los primeros tiempos de su enfrentamiento con la madre naturaleza, y como tales deben ser respetadas. ¿Cómo es que osamos, entonces, acomodar las cosas a nuestra mejor conveniencia?...Las mujeres son las ayudantes de Juan Choqne, quien se presentaba asistido por dos de ellas, curiosamente nombradas como las devotas acompañantes de Cristo durante su ministerio en la tierra. El dansaq de Huancavelica, en tal línea, incluye en su cortejo a mujeres que bailan, como waylías, con su pañuelo y con melodías distintas a los del dansaq. Es otra cosa.
La función de relación que cumple el sacerdote andino, el dansaq, entre la tierra, el Kay Pacha y las fuerzas superiores, es confiada solamente al varón escogido, preparado y autorizado en las grandes caídas de agua o en lugares muy especiales. El dansaq baila solo y enfrenta todas las pruebas de resistencia al dolor, también solo. Las “mujeres dansaq” carecen de cualquier tipo de autorización, no han celebrado “el contrato” y se autotorturan injustificadamente, en su afán de ganarse algunos aplausos y también algunos soles, sin duda. En tal escenario, ¿deberíamos aplaudir al estilista que pensó deslumbrar la atención mundial, promocionando la vestimenta del Dansaq, exhibiéndola en el cuerpo de una bella mujer, diciéndole al mundo entero que en el Perú, esta vestimenta en usada por las mujeres danzantes, lo cual es sólo una fantasía fuera de toda cordura?.

Otra cosa: los adornitos, los mil colores, las telas y las grecas brillosas son introducciones de los jóvenes dansaq preparados en Villa el Salvador. El maestro Cirilo Inca, nuestro dansaq vivo, ha descrito los vestuarios de los verdaderos dansaq como muy austeros. Si bien menciona algunos grabados y toscos bordados, representando las figuras de cóndores o culebras, nombra sólo colores más serios, imponentes, nada chillones. La modernización de la ropa del dansaq se explica por el florecimiento de la artesanía del bordado en Lima. La incontable cantidad de artistas que cantan acompañadas por arpa norteña ya no saben qué colores más añadir en sus vestuarios para distinguirse. Nuestros jóvenes danzantes, también están recurriendo a ellos y cada vez con más frecuencia, los vestuarios están colmándose de cintillos y flecos de mil colores. Hacen bordar sus nombres de batalla y sus lugares de origen con la mayor aparatosidad. Me imagino que tanto oropel y chafalonía hayan impresionado a los responsables peruanos del concurso Miss Mundo quienes, con la mejor intención, tomaron acuerdo tan equívoco e injustificado, que nosotros objetamos de plano, por supuesto.

miércoles, 4 de agosto de 2010

AHORA QUE TODO ES FUTBOL...¡CAMPEONATOS ... LOS NUESTROS!...2a. Parte


Estamos en deuda... Con el tráfago de eventos que han ocurrido en nuestra existencia, vinimos postergando la parte complementaria del relato que sobre el desarrollo del futbol en Andamarca habíamos empezado a presentar todavía en el mes de junio. El refrancito es tan antiguo como utilizado y no por ello, menos cierto: Más vale tarde que nunca. Caychallam tay...

 Oye, compadre Pato, cómo le contestas así pues a mi casi suegro.

Es el Presidente de la Liga, festejándole la ocurrencia de hace un rato. Y con ese tono zumbón que lo caracteriza, el popular Arias responde:

 Pero, yo no he mentido cumpa. ¡Vale el saber!, ¿sí o no?. Este año, Alianza va a completar el cuarto campeonato y al próximo, el quinto. Después no nos presentamos. Para qué ya, si no tenemos rival. ¡Vale el saber!, ¿sí o no?.

Y la risa es el pretexto ideal para que el buen “Alma”, también profesor, recuerde que el calorcito está provocando:

 Ya, pues, Pato, tócame la puerta.

Un buen vaso de la espumante es una necesidad nacional. Lástima que la señora presidenta del Ugarte, club en el que juega el de la sedienta iniciativa, lo jala y le dice:

 No, nada de espumantes, hasta que ganes el partido. Entonces nos pondremos las cajitas. Antes de jugar no. Este Pato queriendo hacer tomar a mis jugadores, ¿no?.

El desafío cervecero habrá de postergarse. El clásico de clásicos, el partido de la muerte, el del año, está por librarse ya. Hoy día, hasta las viejecitas han venido, porque no se quieren perder tan fenomenal encuentro. ¡Alianza contra Ugarte!. Las apuestas van y vienen. Algunos se están comiendo las uñas de puro nerviosismo, mientras los delegados y entrenadores ultiman los preparativos. Los gritos de las barras colman el espacio:

 ¿Quién es el mamá?!!
 ¡Ugarte!!
 ¿Quién es la papá?!!
 ¡Alianza!!
 ¡Arriba Alianza!
 ¡Ayayay!

Desde las primeras incursiones del fútbol, marcadas en aquellos heroicos partidos qalachakichas, han pasado muchos años. Ahora, el Estadio está mejor presentado, se han hecho trabajos de aplanamiento, los arcos también son fijos, con tubos gruesos de fierro, asegurados con cemento. El Campeonato se está disputando entre 20 equipos participantes, todos con jugadores debidamente registrados en sus fichas, con carnets, con fotografía. Un mes antes, el señor presidente de la Liga ha invitado a todos los clubes a las reuniones de organización. En arduas sesiones libradas en el Salón Consistorial del Municipio, se ha discutido las Bases, el Reglamento, y se han nombrado las comisiones respectivas para todas las actividades, incluídas las de inauguración y clausura.
Uno de los puntos de mayor discusión ha sido el referido a la “nacionalidad” de los jugadores. Los “extremistas” insistieron para que no se permitiera ningún jugador extranjero: todos debían ser andamarquinos. Neto a neto, “ñato a ñato”. Otros hablaban de la necesaria oportunidad del intercambio, que era positivo que vinieran buenos jugadores de otros lugares. En fin. Ha ganado la idea intermedia y se ha permitido la inclusión de sólo tres jugadores ajenos. Naturalmente, es aceptado que los hijos de andamarquinos también lo son, así hubieren nacido en otras regiones. Igual calidad alcanzan los yernos y parientes muy directos. Todo bien detalladito, todo bien estudiado, bien chancadito, porque para esto de las discusiones “jurídicas” los antamarcas son pintaditos. O ¿acaso ya se olvidaron las retóricas confrontaciones cuando el problema de la distritalización?...
Cada institución contendiente han activado los más efectivos resortes para presentar sus mejores elencos. Hasta se habla de apetitosos contratos. El Alianza, tiene sus dos socios puquianos, los hermanos Costa “Costal” y “Nodi” Toledo. Completa el trío el reclamado Caballita, que viene de Cabana. El Atlético Alfonso Ugarte, también se ha reforzado con el “cullo” Carrillo, profe en Mayobamba, Pérez Albela de Aucará y otros. Los de Lima, ni hablar. De manera que el pueblo está convulsionadísimo.

Desde su inauguración el día 20, el campeonato se ha desarrollado con gran suceso. Las chicas también cumplen su parte: muy activas y guapetonas, incendian las barras, preparan los refrescos, enamoran también.
Este torneo es único en el mundo. El impresionante rush de partidos va de ocho de la mañana a seis de la tarde, sin parar, durante ¡ocho días seguidos!. Algunos clubes juegan hasta dos partidos por día. Toda la población acude al campo. Las señoras han cocinado temprano para cumplir rapidito las obligaciones, ordeñar las vacas, por ejemplo. Hay quienes ni van a almorzar a sus casas. Fútbol sin parar, fútbol hasta el “cunca cuchu”(39), más de una semana. Y el asunto no sólo es en el campo, porque en la noche sesiona la Liga y su insobornable Comisión de Justicia. Un jugador profesional juega un partido y descansa una semana. Aquí, como los clubes cotejan “todos contra todos” nuestros jugadores entregan media vida en inacabables partidos, todos los días, sin dejar de atender a sus actividades agrícolas y ganaderas.

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 Comunkuna, rikchachkankichkcñachu. Qatarimuychikñayá. Ventiocho casqanta llapallaykichik callita pichankichik, pirqakunatapas ichmawanpas pintankichik.
 (Señores comuneros, ¿ya han despertado?. Levántense ya. Por ser veintiocho, todos barrerán sus calles y pintarán sus paredes, aunque sea con cal).

Clarita se ha escuchado la voz de Camilón Flores, ca-ca-ca-mílon, el pregonero oficial, en la impresionante y fúlgida limpieza de esta madrugada. Desde Qayaq Orqo, bien a la hora del “pim canki”(40), un poquito antes del “wallpa waqay” (41), está notificando a la población. La prolongación de los ecos agudos, la exagerada inflexión de voz, en mensajes que alternan resondrones y súplicas, terminan por convencer a los oyentes, porque la ciudad empieza a agitarse nerviosamente.
Julio tiene un color especial en la vida andamarquina. La última quincena, con motivo de las Fiestas Patrias, todo cambia. Las casas se remozan, las calles lucen ropa de fiesta, porque los empedrados han sido renovados. Desde las canteras de Pakupata ha venido la especial ichma o arena blanca muy fina, en espaldas de mujeres y maqtas, para preparar una buena pintura diluyéndola con agua. La aplicación es sencilla: con un jarrito la irán arrojando contra la pared y el agua blancuzca formará arcos o semicírculos. Un montonal de ellos superpuestos, al final le habrá dado una cara nueva a la pared. Los más empeñosos, han traído arena rojiza para dibujar las partes bajas y zócalos.

La Plaza de Armas es un hervidero multicolor. Desde temprano, toda la población se ha reunido aquí luciendo sus mejores galas. Es 28 de Julio, fiesta mayor en Andamarca. Las mujeres estrenan walis, monillos, rebozas, sombreros, hasta zapatos nuevos. Los varones, para no ser menos: ojotas, waras y camisas recién compradas donde Julián Puno y se han afeitado con qespe de botella verde.
Todos han entonado con emoción el Himno Nacional al iniciarse la actuación. El discurso central de uno de los profesores recuerda la gesta heroica de la independencia nacional. Algunos alumnos recitan poesías, leen composiciones o representan momentos de nuestra historia, ante la mayoritaria aprobación. El desfile escolar corona las emociones, acrecentadas por el acompasado toque de su Banda de Guerra: tres cornetines en exceso envejecidos y golpeados, que se desgañitan al compás de dos tambores ya vencidos por el uso. Han participado también el batallón de licenciados del Ejército con sus clásicos uniformes, las delegaciones de Chiricri, Huaqraqa y la representación llegada de Lima.

El día anterior, el 27, se ha dado la gran Corrida de toros, ofrecida por el señor Gobernador, como representante del Gobierno. Los dueños de las estancias de puna han bajado los toros bravos con máxima especialidad. El señor Alcalde es responsable del armado de las barreras en las cuatro esquinas de la plaza de armas con la ayuda de los varones recién casados. Gruesas sogas de paqpa o cabuya, han trenzado los maderos plantados en tierra. Los diestros más afamados de la Comunidad han ingresado a desafiar a bravísimos ejemplares de las dehesas de Qellqata, Wicso, Timpuq o Wantaymisa. En esta oportunidad como en los pasados años, ha sido muy comentada la intervención de Julián Puno clásico por torear con un pañuelo solamente. Por su parte, Ernesto Escajadillo se ha vestido de luces y ha brindado memorables faenas, al compás y al calor de los waqrapukus magistralmente ejecutados por Julio Quispe o Leonidas Huamaní. Damas de la sociedad andamarquina, han preparado vistosas divisas con sugestivos bordados en telas de colores, que han lucido los ejemplares, cuyos propietarios los conservarán con orgullo.

La vida en las moyas lejanas, produce efectos raros en los animales. Algunos, por ejemplo, como que se vuelven locos y sus crías heredan esas características. “Piñayarunmi wacay”, “mi vaca ha embravecido”, dicen. Y los cuidan especialmente, para que defiendan el prestigio de sus crianzas en la corrida del 27. Es una tarea realmente complicada hacer llegar los animales al pueblo y encerrarlos en el corral contiguo a la plaza, para la tarde taurina. Claro que animales casi salvajes, no aceptan de buen grado la notificación de bajar al centro poblado.
Todo un contingente ha llegado a las punas, con la guía de un pongo o maestro, quien ha depositado ofrendas o “pagos” a los Wamanis protectores. Ha zahumado a los animales que viven en absoluta libertad y no salen de su querencia así nomás. El pongo logrará que los animales bravos, se pongan en camino, mansamente, en compañía de su tropa. Los arreadores vienen dando voces de mando y si el bravo se les quiere ir encima, los calman con la mágica varita del “qasi” (42), un raro arbusto de las punas, ante cuya visión el animal agacha la cabeza.

Desde muy de madrugada se ha movilizado el cortejo y debe estar llegando al pueblo más o menos a mediodía. Después de jugar en la plaza, los animales retornarán inmediatamente a sus estancias, pues con la cólera no han probado ni agua ni pasto. Ni siquiera necesitan de la guía de sus dueños para el regreso. Éstos apenas si alcanzan a dirigirlos hacia el camino de salida y los sueltan, muy seguros de que llegarán sin problemas a sus pagos.
La costumbre del “toro pukllay” ha llegado a Andamarca recién con los “mistis”. A ejemplo de Puquio y San Juan, los afuerinos la han venido impulsando para Fiestas Patrias y, cosa rara, los naturales son, ahora, los más entusiastas seguidores. Por eso, ayer todo el pueblo ha estado en la Plaza y muchos hasta lloraron de emoción al ver jugar a sus animales.

 Estas fiestas han tenido un color especial. Es que han llegado de Lima muchos paisanos.
 ¿Ricurankichu Juliachata, Claudianachata, Rosachata?.
 (¿Has visto a la Julia, la Claudiana, la Rosita?)
 Manachús, ¿kaipichu?.
 (Me parece que no. ¿Están aquí?).
 Chukchampas qelloyarusqa, siminpas llutisqallaña, ben mamaceta, pés.
 (Hasta sus cabellos se habían amarilleado, sus bocas pintadas, bien mamacitas, pues).

Los visitantes han hecho importantes regalos a la Escuela y han participado en el Campeonato de Fútbol. Se han traído a un jugador negrazo, como los que sólo habíamos visto en periódicos pasados que a veces llegan. En nuestra fiesta de la Sequia salen los negritos, pero son muchachos pintados y disfrazados, que mataperrean y bailan con sus rondines, entonando versos disparatados. Pero éste era tremendote y los chicos lo veían asustados. Dicen que juega en el Estadio Nacional de Lima y ha venido para dar exhibiciones y así puedan aprender nuestros muchachos. Claro que el pobre negro, dos corridas en Millupampa, y ¡kasqachús!, ¡ya no hay!. Con la altura, sacó lengua rápido, agarrándose el estómago. Pero cuando le llegaba el balón hacía unos quiebres y unas fintas que nos han dejado boquiabiertos y que algunos ya estamos empezando a practicar.

 “A continuación, -dice el maestro de Ceremonias-, a nombre del señor Alcalde y su cuerpo de Regidores, se invita a la ciudadanía a pasar al Salón Consistorial para la Sesión Solemne en Honor a nuestra Independencia. Como acto central, también se entregarán los premios a los participantes y triunfadores del recientemente clausurado Campeonato de Fútbol”.

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Es lógico, entonces, el extremo calor de los festejos, el día de la Premiación que ha sido cumplida con gran solemnidad en el Concejo Municipal.
Cumplido el protocolo, las instituciones han fugado hacia sus locales. Comparten ahora, la mesa de la victoria del “Juventud Alianza Andamarca”, el Presidente en ejercicio don Fermín Miranda, los socios don Antero Escajadillo, don Herminio Herrera, don Elías Alfaro, don Roberto Herrera, acompañados por una bulliciosa y entusiasmada juventud. Muchos Trofeos exhibidos orgullosamente en la galería principal del establecimiento-billar de don Robe, -local institucional-, recuerdan gestas memorables, de triunfos. La Copa de Plata es la presea engreída. Su posesión se tornó definitiva después de haber campeonado durante tres años. Porque no dejaba de tener razón Antezana. Con éste, Alianza, el renombrado Juventud Alianza Andamarca coronaba el cuarto Título consecutivo. Y no era un club de poderío económico. Todo era puro corazón. De donde fuere, para el campeonato llegaban los insustituibles hermanos Moreno, los Escajadillo, los Herrera, los Palomino y muchos más.

La velada transcurrirá entre velos de alegría compartida y de satisfacción por el lauro obtenido. Han abundado los discursos, a cual más elocuentes, y los deseos de seguir construyendo un futuro brillante para la institución, en base al esfuerzo conjunto y la convicción de todos sus integrantes. Cada socio mayor ha aportado lo necesario para el exquisito platillo que las damas han preparado con mayor esmero. No iban a faltar, por supuesto, los sucesivos brindis, ahora sí merecidos y reclamados.

Pasará el tiempo, inexorablemente. El avance futbolístico se hará notar con mayor acento, en las generaciones nuevas, sin ninguna duda. De la memoria popular, sin embargo, jamás podrá borrarse la estampa de veintidós hombres de campo, expertos en el manejo de la lampa y el pico, disputando pies descalzos y gran hombría, el “pukuchu balón” y dejando en cada jugada inolvidables lecciones de caballerosidad y generosa entrega.