lunes, 3 de junio de 2013

¿INDIO YO....? ¡ESTÁS BIEN C....!


De pronto nos tocan con fuerza la puerta a ver si despertamos. Asuntos que creíamos vencidos por la historia, han vuelto a ponerse sobre el tapete. La pregunta es muy sencilla: ¿somos indígenas?. Me estoy corriendo el riesgo de que me conviertan en piñata, porque decirle “indio o indígena” a un peruano nacido en la sierra de nuestra patria, es proferirle el peor insulto.

La coyuntura es realmente jodida. Si las comunidades andinas no nos reconocemos indígenas, simplemente no tenemos derecho a la Ley de Consulta Previa. Así de simple. Ese “consuelo” que nos habían alcanzado al nombrarnos “campesinos” para librarnos del baldón de llamarnos indios o indígenas no funciona en este caso. O somos indígenas o somos mestizos. No hay más. Recordamos que el Día 24 de Junio, Día del Indio, pasó a llamarse Día del Campesino por la Ley de Reforma Agraria, promulgada por Velasco.

El tema es que el Gobierno ha otorgado el cúmplase a la Ley N° 29785, Ley de Consulta Previa, en aplicación del Convenio 169 de la OIT, dictada el 27 de Junio de 1989. Este Documento recomienda a sus países miembros a implementar la Consulta Previa …. “reconociendo las aspiraciones de esos pueblos (indígenas o tribales) a asumir el control de sus propias instituciones y formas de vida y de su desarrollo económico y a mantener y fortalecer sus identidades, lenguas y religiones….”
Más allá, en el Art. I, establece: “El presente Convenio se aplica a: A)…… B) a los pueblos en países independientes, considerados indígenas, por el hecho de descender de poblaciones que habitaban en el país o una región geográfica a la que pertenece el país en la época de la Conquista o colonización o del establecimiento de las actuales fronteras estatales y que, cualquiera que sea su situación jurídica, conserven todas, sus propias instituciones sociales, económicas, culturales y políticas o parte de ellas….”

Como quiera que los territorios de nuestras Comunidades andinas están siendo literalmente invadidos por las empresas mineras, se ha generado un bolsón de conflictos sociales. El Ministerio de Energía y Minas otorga Concesiones a dichas empresas, en territorios de las comunidades campesinas. Y las operaciones externas se realizan sobre la oposición de muchas de estas últimas que reclaman la aplicación de la Ley de Consulta Previa, por lo menos. Entonces, desde los centros de poder, a regañadientes, se acepta “consultar”, pero SOLO A LAS COMUNIDADES INDIGENAS.
Y aquí viene el nudito: ¿cuáles son, cómo se llaman, dónde están esas comunidades indígenas?...

Desde el punto de vista gubernamental, quedan muy pocas de ellas en el país. Por lo pronto, a pesar de provenir de una comunidad indígena, el Presidente ha pontificado que en la costa y en la sierra ya no existen comunidades indígenas, que éstas sólo se encuentran en la selva. El Viceministerio de Interculturalidad del Ministerio de Cultura, encargado de implementar el Reglamento y la aplicación de la Ley de Consulta Previa, asumió la tarea de elaborar la Base de Datos de las Comunidades que gozan de ese derecho. Es lógico que se haya solicitado la opinión de expertos y estudiosos, pero ha sido tal el problemón creado por la falta de consenso, que el funcionario responsable, ha debido renunciar a su cargo. Desde los altos niveles del Gobierno se ha dicho que “el Convenio 169 de la OIT no es aplicable puesto que la población peruana es predominantemente mestiza…” “Las Comunidades Campesinas, que en su origen fueron ancestrales –indígenas- con el desarrollo de la civilización ahora son mestizas, tal es el caso de las comunidades campesinas de la costa y de los valles interandinos de la sierra...“ Otros estudiosos han manifestado: “lo indígena es sólo un ilusión de quienes viven anclados en el pasado…”
Nuestro conocido Juan Ossio ha escrito: “Desconocer que gran parte de las Comunidades interandinas, sean de habla quechua, aimara e incluso hispana, son indígenas, es una señal de absoluta ignorancia por parte algunos miembros del actual gobierno…”

Por supuesto que la discusión tiene larga historia, desde la invasión europea. No es reciente. ¿Nuestras comunidades andinas son indígenas o no?.. El empresario minero que necesita entrar en sus territorios, va a decir que no lo son y, en consecuencia, NO les corresponde acogerse a la Ley de Consulta previa, porque “no toda Comunidad es un pueblo indígena”. El Primer Ministro ha hablado de algunos indicadores: 1° que la comunidad tenga lengua originaria o nativa, 2° que esté establecida en tierras comunales ancestrales y 3° que la población deberá estar conectada a patrones culturales, ancestrales antes de la Colonia. ¿Nos suena a conocido?...

Bueno, así están las cosas. Según algunas versiones, la dichosa Lista o Base de Datos de Comunidades Indígenas ya está elaborada desde el año pasado, con sólo 52 miembros. El Ministro de Energía y Minas señaló, entretanto, “que 14 proyectos mineros de la sierra no pasarán por consulta previa porque no hay comunidades indígenas en esa región”… La pregunta es ¿por qué será que no quieren publicar la tantas veces mencionada Base de Datos… ¿Nuestras comunidades lucaninas figuran en dicha lista?. ¿Hemos sido reconocidos como indígenas, para que nos alcance la Ley de Consulta previa?.. ¿O hemos sido excluídos por haber cambiado nuestra condición de indígena por la de mestizo?...

No hay que olvidar que la consulta previa no sólo es para situaciones de minería sino para todo lo que concierna a nuestra propia organización y formas de vida. La aludida Ley lo declara: “Es el Derecho de los pueblos indígenas u originarios a ser consultados de forma previa sobre las medidas legislativas o administrativas que afecten directamente sus derechos colectivos sobre su existencia física, identidad cultural, calidad de vida o desarrollo… La finalidad de la Consulta es alcanzar un acuerdo o consentimiento entre el Estado y los pueblos indígenas originarios respecto a las medidas legislativas o administrativas que les afecten directamente…”

Y a todo esto ¿cómo vamos por casa?.. ¿Qué dicen, qué hacen nuestros dirigentes comunales, nuestros representantes o nuestro pomposamente llamado “gobierno local”?... Por desgracia, parece que ni se dan por enterados. Están en otra nota, como quien oye llover. Desconozco que hubieran tratado el problema siquiera en alguna reunión informal. Parece que se han creído la monserga de que el asunto no nos concierne, que sólo es un tema de las comunidades de chunchitos o nativos de la selva. Hay que recordar que éstos sí se están batiendo heroicamente, con todos los medios a su alcance.
No se ve algún movimiento en nuestra zona. Peor aún, alientan abiertamente la minería. ¿Habrán terminado de gastar, mis paisanos andamarquinos, las treinta Luquitas que una minera les pagó para ingresar a Quilcata y horadarla a su gusto?... Si, como se sabe, algunos de ellos andan buscando mineras, ¿qué pito les interesará la Ley de Consulta Previa?...

Pero, no divaguemos. Al tema, como dicen los sabihondos de mi tierra: ¿Cómo es?... ¿Somos indígenas o no?... Por lo pronto, nuestro simpático Alcides Canales se declaraba a voz en cuello como “el último misti de Andamarca”.
Lo que es yo, cuando me obligan a asistir a esas reuniones de encopetados paisanos, con harta corbata y rubias cabelleras pintadas, me cobijo en algún rinconcito y, si encuentro a alguien que piensa como yo, le invito: “Qamuy, yau Belacha, cay cuchuchallapi natural pura parlacusun”….

Cuestioncita previa

Desde los artículos iniciales, he procurado no tocar temas de coyuntura política en estas páginas. Pero, vivimos tiempos que exigen rápidos y claros pronunciamientos de nuestra parte. Espero aportar un granito de arena siquiera, con la esperanza de que reaccionemos y tomemos actitudes coherentes con nuestra historia y el futuro que buscamos forjar en nuestros pueblos.

Indígena: Originario del país de que se trata.
Indio: Natural de la India. Se dice del indígena de América o sea de las Indias Occidentales, al que hoy se considera como descendiente de aquel, sin mezcla de otra raza. (Diccionario de la Real Academia Española).